Posicionamiento SEO: Guía de migración de sitios Web
En ocasiones resulta necesario modificar o renovar nuestro sitio web, cambios a su estructura tanto de contenido, URLs, dominio, código o UX son conocidos como migración. Una planeación adecuada puede evitar dañar el trabajo de SEO ya realizado, y a la vez potenciarlo con nuevas herramientas. ¡Aprende cómo evitar efectos negativos con estos pasos!
Tipos de migración
El principal objetivo al planificar una migración es reducir al mínimo la falta de visibilidad del sitio en las primeras semanas y posteriormente mostrar una mejoría en cuanto a posicionamiento SEO con respecto a la versión anterior.
La migración más grave que puede sufrir un sitio es un cambio de dominio, por ejemplo:
- Al realizar el cambio de protocolo HTTP a HTTPS.
- Al crear un subdominio o cambio de sub carpeta.
- Cuando es necesario crear un nuevo nombre de dominio.
- Cuando se cambia la estructura interna del sitio, afectando la vinculación y la estructura de la URL.
Otro tipo de migraciones a las que puede enfrentar un sitio son:
- Cambiar de un CMS a otro.
- Cuando se realizan modificaciones al contenido, lo que puede comprometer las búsquedas orgánicas.
- Cambios en el diseño, que puede afectar la metadata u otros códigos.
Revisemos a continuación los 5 pasos básicos para generar una migración sin inconvenientes.
1. Planeación y objetivos
Una migración no necesariamente provocará daños irreparables al sitio si realizamos los pasos correctos. Sin embargo, debes estar consciente de que será inevitable una disminución temporal de tráfico. Considera los siguientes puntos para una implementación efectiva:
- Definir muy bien los objetivos que nos impulsan a realizar esta migración
- Planear la migración en una temporada de menor movimiento.
- Estudia los patrones de visita y calendariza con antelación.
- Identificar a las personas que estarán implicadas, por ejemplo, el desarrollador web, editor, consultores de SEO y UX, etc.
- Conocer, comunicar y definir cuáles serán sus tareas y los tiempos para desarrollar cada una de ellas.
2. Preparación
En esta etapa se llevan a cabo todas las actividades necesarias para la entrega del nuevo sitio. Debemos revisar los wireframes, es decir, la representación gráfica de la estructura del sitio web, para identificar algunos problemas de SEO o UX antes de entrar de lleno en el rediseño del sitio.
Es importante definir en esta fase las especificaciones técnicas para SEO que requiere la nueva versión. De esta forma los desarrolladores las tendrán presentes al realizar cualquier cambio, por ejemplo: la estructura URLs, títulos, paginación, links internos, navegación principal y secundaria, etc. Es indispensable asegurarse que al momento de modificar algún elemento no se vea afectado ningún otro.
Es indispensable asegurarse que al momento de modificar algún elemento no se vea afectado ningún otro.
El redireccionamiento del sitio anterior al nuevo es crucial para que los motores de búsqueda comprendan que se trata de la misma web, si lo ignoramos, será como empezar desde cero.
3. Pruebas pre lanzamiento
Hay varios aspectos técnicos que se deben probar antes de lanzar el sitio, como re direcciones, etiquetas canónicas o mapas del sitio XML. Durante las pruebas, no olvides mantener el sitio oculto para que Google no lo rastree. Esto se consigue limitando el acceso a direcciones IP específicas.
Como en este punto las pruebas A/B no son posibles, sería conveniente incluir a algunos usuarios reales para que naveguen el sitio y brinden retroalimentación en cuanto a su UX.
Revisa que los metadatos, títulos, subtítulos y sobre todo los enlaces internos se hayan transferido correctamente.
Prepara el archivo robots.txt para verificar que no existan problemas o bloqueos dentro del sitio que impidan su rastreo.
4. Lanzamiento
Mientras el nuevo sitio sustituye al anterior, es importante que durante el tiempo que se esté fuera de servicio, se dé una respuesta de servidor 503, lo cual indicará a los rastreadores que se está en labores de mantenimiento de manera temporal.
Una vez que el sitio esté listo, dirígete a Google Search Console y solicita que se rastree el nuevo sitio, carga el mapa del sitio XML, usa la herramienta “Cambiar de dirección” en caso de que utilices un dominio nuevo. Utiliza la función “Buscar como Google” en la página principal y algunas páginas secundarias representativas para asegurarte que no existan problemas de rastreo.
5. Pruebas post lanzamiento
Una vez que el nuevo sitio está en línea se debe realizar un nuevo análisis para asegurar que todo funcione a la perfección. Básicamente se vuelven a realizar las pruebas previas al lanzamiento, pero ahora sobre el sitio en modo público, por lo que contarás con mayor información y podrás profundizar más en la depuración de errores y revisar, por ejemplo, si una redirección no ha sido apropiada.
Analiza el tráfico del nuevo sitio diariamente por lo menos durante una semana para identificar cualquier error de rastreo o problema de vinculación.
Por último, contacta a los principales sitios que enlazan hacia el tuyo para notificar el cambio y pedir que actualicen sus links con la nueva dirección.
Mientras más cambios se realicen al mismo tiempo, será más complejo identificar las fallas que se puedan presentar, sin embargo, con una buena planeación y apegándose a ella en su ejecución, es posible realizar una migración exitosa a gran escala en lugar de realizar varias pequeñas modificaciones constantes que tomen más tiempo y recursos.