Descubre el secreto del poderoso contenido visual
Nuestro cerebro procesa el contenido visual 60.000 veces más rápido que el texto; de ahí el impacto que puede generar en una estrategia de Marketing de contenidos. Tanto es así, que el 84 % de toda la comunicación proveniente del marketing se prevé que sea visual para el año 2018.
Sin embargo, para conquistar el cerebro y corazón de los usuarios, esa información entregada debe ser atractiva, original, relevante y de alta calidad; sobre todo, considerando la enorme competencia que existe en la web. Así aumentarás el compromiso y lograrás que tu mensaje sea recordado por más tiempo.
Pero ¿qué se necesita para lograr un contenido poderoso? El sitio Convince and Convert, nos ayuda a descubrirlo:
1. Mezclar contenido visual y escrito
El valor y utilidad de una imagen no supone restar lugar o importancia al texto; por el contrario, juntos se pueden potenciar entre sí, para generar una comunicación más eficiente con el público. Por ejemplo, imagina que estás redactando un artículo sobre el uso de redes sociales en América Latina y necesitas un par de imágenes para graficar algunos de tus puntos. Ciertamente, podrías optar por una de buena calidad que muestre los íconos de Facebook, Instagram, Twitter y LinkedIn; pero estarías desperdiciando un espacio que puede entregar mucho más.
Es decir, podrías acompañar cada uno de esos íconos con algún dato estadístico representativo, como el porcentaje de uso desde dispositivos móviles o los países con mayor tasa de penetración. De ese modo, tu imagen inicial adquiriría mucho más valor y sería de gran utilidad para tus lectores.
Por lo tanto, es importante aprovechar la enorme oportunidad que existe para potenciarlas con números y palabras. Ello ayudará a entregar un contenido de calidad, más claro, original y efectivo.
2. Agregar contexto
Supongamos que asistes a un seminario sobre realidad virtual, grabas un par de segundos la cara enojada del expositor, y la compartes en la cuenta de Twitter de tu sitio web, con el hashtag del evento. ¿Qué opinarán quiénes vean tu post? Probablemente que el señor es desagradable y tiene mal carácter. Sin embargo, su expresión se debía a que en ese momento él estaba ejemplificando parte de su contenido con un gran despliegue histriónico. Entonces, ¿fue un aporte tu tweet? Claramente no.
Y he ahí, otra vez, el poder de la palabra para contextualizar la información. O sea, si hubieses grabado el ejemplo entero y al compartirlo adjuntas algunos caracteres para explicar de qué se trataba el video, no habrías perjudicado la imagen de esa persona e incluso hubieses posteado un contenido útil y valioso para tus seguidores.
En síntesis, como se afirma en Convince and Convert, las palabras tienen la capacidad de proporcionar aquellos detalles que faltan en la información visual, para sacar las conclusiones correctas y, obviamente, no alterar la veracidad de lo expuesto; algo elemental en el Marketing de Contenidos.
3. Entregar un significado más profundo
Los videos, fotos, infografías, ilustraciones, diagramas, gráficos, y todo lo que entre en la categoría de visual; generan emociones que se realzan con el uso de un texto, y que son indispensables para concretar ciertos objetivos, como el aumentar las ventas de un producto, generar conciencia sobre un acto determinado, potenciar la utilidad de un servicio o convertir visitantes en suscriptores.
Por ejemplo, pensemos en el lanzamiento de una campaña para reforestar bosques. Si solo se transmite un video con imágenes comparativas entre un área con árboles y flores, junto al de una con cenizas; tal vez genere asombro, pero difícilmente se logrará lo esperado. En cambio, si en ese video se incluyen palabras referentes a la cantidad de flora y fauna que está en peligro de extinción, las consecuencias para los humanos y cuán urgente es actuar al respecto; se generarán sentimientos más profundos, y la efectividad de la campaña aumentará considerablemente.
O sea, el uso de nuestro indispensable abecedario nos brindará infinitas oportunidades para construir una historia atractiva, que capte la atención de las personas y las haga sentir deseosas de la información entregada.
En consecuencia, la clave de un contenido visual es la incorporación de palabras que permitan mantener una óptima comunicación con el público, aporten contexto y otorguen un significado más profundo a los destinatarios; lo que indudablemente contribuirá a ejecutar una estrategia de Marketing de Contenidos mucho más exitosa y singular.
