Contenido en redes sociales: 10 errores comunes
Si estás dedicando recursos y esfuerzos en promover tu negocio a través de social media sin conseguir grandes resultados, quizás es hora de que te replantees tu plan y estrategias de contenido. Existen una serie de errores comunes que se cometen en redes sociales a la hora de llevar a cabo un plan de Marketing Digital. Es por esta razón que te mostraremos cuales son los 10 que más se repiten para que te adelantes y no caigas en las mismas fallas.
1. No tener un plan
Es una pésima inversión entrar al mundo de las redes sociales si es que no has previsto un plan de largo plazo. Por ejemplo, si inicias una página de Facebook y comienzas a hacer publicaciones, inyectar recursos para que sean publicitadas y haces crecer tus seguidores, será todo en vano si el día de mañana desapareces de la red y dejas de ofrecer contenidos. Tu flujo de interacciones con la comunidad que vas forjando debe ser continuo y sostenido en el tiempo para que pueda ser exitoso.
Para que haya un progreso real deberías tener en cuenta el tiempo a invertir, estrategia y objetivos, además del equipo que se encargará de interactuar. Pregúntate “¿cómo afecta el contenido en redes sociales a mi negocio?” y trabaja en base a ello.
2. Hacer spam
Otro error común es creer que, a mayor cantidad de publicaciones, habrá un aumento en la interacción con el público. Nada más lejos de la realidad, lo que cautiva a la audiencia son contenidos de calidad, originales y útiles. No pierdas el tiempo bombardeando tus redes con cosas que no causan verdadero revuelo.
3. Múltiples perfiles
Muchas veces las empresas construyen un perfil, pero con el tiempo diversas razones llevan a levantar otro en la misma red social. Esto genera confusión en el público y fragmenta el total de seguidores. Si ya tienes una cuenta para tu empresa busca hacer todo lo necesario para mejorarla en vez de alzar otra.
4. Muy poca interacción
Puede que estés constantemente publicando cosas interesantes y generando respuestas del público, sin embargo, para que tu marca se gane la auténtica confianza de ellos debes participar en las conversaciones. A veces basta con agradecer el comentario, otras veces requerirá responder una pregunta o una crítica. Este tipo de interacción da a entender que la empresa está interesada en lo que su audiencia dice y opina.
5. No tener seguidores reales
Esto suele ser consecuencia del spam y constantemente publicar sin medir resultados. No importa cuánto material lances a las redes sociales, tienes que asegurarte de que esto llega a alguien y que es apreciado. Es muy frecuente ver páginas en Facebook extremadamente activas, con apenas un par de “me gusta” por publicación.
6. Crear backlinks irrelevantes
Es lógico pensar que tener marcadores sociales de páginas que ofrecen enlaces a tu sitio podría ser beneficioso, por otra parte, estos deben ser relevantes para la comunidad o simplemente estarás contribuyendo a perder su atención.
7. Excesiva automatización
Existen diversas herramientas para automatizar publicaciones y backlinks, aun así, no es sabio dejar todo al azar. Es mejor buscar el momento y contexto adecuado para cada cosa, deja lo automático para contenidos atemporales.
8. Timidez
Una cosa es publicar en exceso y otra cosa es medirse tanto que se llegue a ser retraído. La interacción debe fluir y para ello debe haber temas que levanten conversación. Debes estar presente, entregando material y una sensación de confianza a tu audiencia.
9. Invertir sin balancear
Cuando pagas por promocionar un sitio estás pensando en obtener nuevos seguidores, no obstante, nada asegura que sean los “correctos”. Hay otras formas de conseguir tráfico tales como SEO y compra de contenidos de calidad: debes invertir balanceadamente en todas las aristas para lograr que tu audiencia sea amplia y atenta.
10. Hablar con el público equivocado
Puedes arreglar todos los errores anteriores mencionados en este artículo, pero si no has identificado a tu público y hablas en un lenguaje con el que no sintonizan, seguirás perdiendo el tiempo. Aprende sobre ellos, realiza encuestas, pregunta cosas, pon atención a los detalles. La forma es tan importante como el contenido mismo.
Si estás cometiendo alguno de estos errores, no es tarde para corregirlos. Date el tiempo de hacer ajustes a la forma en que te relacionas y a medida que progresas sabrás por qué preocuparse del contenido en redes sociales.