Cómo crear una buena estrategia de marketing de contenidos
Desarrollar una estrategia de ese tipo implica crear, publicar y generar información valiosa, pertinente y coherente para atraer y retener la atención del público e impulsar su consumo. Como afirma Jason Miller, Gerente Senior de Marketing de Contenidos de LinkedIn, se trata de mezclar inspiración, creatividad y conversación.
Pero ¿cómo podemos ejecutar todo lo anterior y lograr una buena estrategia? En su ebook “How to create a killer content strategy”, la compañía de cloud computing SalesForce, comparte tres pasos para alcanzar ese objetivo.
1. Investigar y planificar
Esta etapa es el cimiento de cualquier proyecto, ella nos permite conocer el escenario en que nos moveremos y tomar mejores decisiones. Según Jason Miller, al investigar nuevos contenidos, es necesario hacerse tres preguntas:
– ¿Qué grandes conversaciones tienen mis clientes y clientes potenciales?
– ¿Qué tan competitivas son éstas?
– ¿Puedo interrumpir ese espacio y/o dominarlo?
Miller afirma que para contestarlas, empieza por combinar la investigación de la palabra clave con la escucha social. Luego, reúne una lista de las preguntas y temas con los cuales el producto o servicio están relacionados; para finalmente, inspirarse, adoptar una posición única e incorporar un sello propio.
Por su parte, para el escritor y fundador de Convince & Convert, Jay Baer; el objetivo principal de cualquier iniciativa de marketing de contenido no es crear grandes contenidos, sino más bien mejorar el negocio gracias a un gran contenido. Por esa razón es tan importante comprender la trayectoria del cliente antes de producir el mensaje.
2. Crear activos
Esto es fundamental para incrementar el valor de una empresa. Sin embargo, hay temas en los cuales se debe poner atención. Por ejemplo, para la directora de contenidos de Marketing Profs, Ann Handley; es necesario replantear el contenido relacionado con los lectores y preguntarse por qué es importante para ellos. Luego de agotar todas las respuestas, la nueva idea debe plantearse con claridad.
Handley afirma que al redactar el contenido de marketing, hay que considerar la estructura que ayudará a comunicar de mejor forma lo que se desea, invertir el mayor tiempo posible en la redacción del titular y recurrir a un editor con buen manejo en gramática.
Para ella no existe una forma exclusiva de escribir. La clave está en imaginarse a la persona que se está ayudando con ese contenido y luego escribirlo dirigido a ésta.
3. Compartir y medir
De nada servirá tener un gran contenido si no se comparte o no hay alguien hablando de ello. Christopher Penn, Vicepresidente de marketing tecnológico en SHIFT Communications, recurre a la biología para explicar este punto.
El ejecutivo recuerda que existen tres factores que desempeñan un importante papel en la propagación de toda enfermedad infecciosa: la transmisión, los síntomas y la gravedad o letalidad. Sin ánimo de comparar el marketing con una enfermedad, Penn asegura que estos factores se pueden aplicar a la propagación de contenidos.
De esa manera, propone lo siguiente:
– Transmisión: no hay que limitarse a un único método de distribución, de lo contrario se reducirá la efectividad del mensaje.
– Síntomas: éstos hacen referencia a las formas en las en que el contenido engancha con el público. Por lo tanto se debe pensar en qué tan optimizado se encuentra para ser compartido.
– Gravedad o letalidad: aquí se ve qué tan rápido el público pierde interés por el contenido, ello llama a redactar uno que convenza, que sea más cercano y en lo posible, atemporal.
Como expone el ebook de SalesForce, claramente no todos los proyectos se podrán cumplir, pero a medida que el contenido mejore habrá más posibilidades de conectar con el público objetivo, facilitar los comentarios, estrechar la relación cliente-empresa y lograr un buen feedback en redes sociales.
Fuentes: SalesForce | Debitoor.
Imagen CC, vía Event Amplifier.