Contenido para web: mejores formas de optimización
La optimización de contenido web tiene como objetivo convertirlo en información amigable para los diferentes motores de búsqueda. Este procedimiento depura cada detalle al máximo para cumplir con los estándares de calidad requeridos. ¿Cuáles son las mejores formas para lograrlo?
Personalizar las URL
La dirección web de cada artículo debe ser breve y contener la palabra clave junto a otro dato de referencia importante para el lector. Compara estos dos ejemplos de un post relativo al nuevo teléfono de Apple:
tecnologiaygadgets.com/iphone-datos-caracteristicas
tecnologiaygadgets.com/iphone7-novedades-2016
En el segundo caso, los datos son mucho más precisos y se refieren al modelo específico de teléfono en cuestión, así como a su año de producción. Por lo tanto, hay que evitar divagar y personalizar cada URL totalmente.
Uso adecuado de las palabras clave
Deberán ser utilizadas un número razonable de veces de forma orgánica. Muchos redactores cometen el error de repetirlas innecesariamente y de forma forzada en el texto. Esta práctica, además de que puede ser detectada como spam, también aburrirá al lector, ya que impide una lectura fluida y natural del contenido.
Longitud suficiente del texto
Los motores de búsqueda se toman muy en serio la calidad de la información publicada. Los sitios que publican frecuentemente información breve, incoherente y con palabras o frases específicas con el único fin de generar tráfico, tarde o temprano serán penalizados. Por lo tanto, la longitud de cada entrada dependerá del tema que trates, pero procura que no sea menor a 250 palabras. Aunque existe la creencia de que los artículos muy largos aburren al lector, en ocasiones será necesario prolongar la información y superar incluso el límite de las mil palabras. Si es así, asegúrate de que tal extensión esté justificada por su calidad y relevancia.
La importancia de los enlaces
Cada enlace debe dirigir al usuario a una página que guarde un contexto exacto con tu propio contenido. De esta forma, un link en una frase como “de acuerdo con las reglas de ortografía de la Real Academia Española”, conducirá invariablemente a la página de la RAE. Por otra parte, las fuentes utilizadas deberán ser veraces y contar con excelente prestigio. Evita enlazar a sitios web sin autoridad en su género, o aquellos con información inapropiada o de dudosa procedencia.
Imágenes atractivas
Agregar fotografías es importante para optimizar el contenido web. Cada una de ellas debe incluir una palabra clave en su nombre de archivo y atributo “alt”; además ser de tamaño suficiente para conservar su calidad, pero sin pesar demasiado. Los formatos jpg, png y gif son los más recomendados. Asimismo, evita incluir demasiadas imágenes, ya que esto ocasionará que la carga de tu página sea más lenta.
Títulos concisos
Cada uno de ellos debe ser directo, resumir el tema principal y contener la palabra clave. Usa tu imaginación para crear títulos que sean llamativos y lo suficientemente sugerentes para provocar curiosidad en el lector e invitarlo a descubrir el resto del contenido.
Actualización constante
Publicar información de calidad en forma regular, es una buena forma de posicionarse más rápidamente en los motores de búsqueda. No obstante, cada nueva entrada debe ofrecer algo diferente y novedoso. En otras palabras, es preferible crear contenido relevante tres veces a la semana, en lugar de postear cinco entradas repetitivas cada día.
Botones de redes sociales
En la actualidad los iconos de “share” en Twitter, Facebook, Google Plus, LinkedIn y páginas similares, son parte fundamental de cualquier sitio en internet. Esto permitirá que tus artículos se compartan en estas redes, algo bastante significativo para que tu trabajo se dé a conocer a un mayor número de personas. Así, probablemente el día de mañana alguno de tus posts se convierta en tendencia viral gracias al poder de las redes sociales.