8 técnicas para curar contenidos
Te has preguntado: “¿Qué es curar contenidos?”. La respuesta puede ser sencilla, aunque la práctica no tanto. Se trata del cúmulo de actividades que se complementan entre sí con el fin de ofrecer una mejor experiencia al lector. Conlleva investigar, revisar, seleccionar, modificar y jerarquizar la información encontrada en diversas fuentes informativas y canales de difusión. A continuación, te mostramos 8 técnicas para curar contenidos.
1.- Obtención de extractos. Consiste en hacer una especie de disección del texto: extraer el título, las primeras frases, alguna imagen y las líneas más destacadas del artículo. Aplicar esta técnica es fácil y sencillo, pero se deber ser cuidadoso y profesional para evitar caer en el plagio o en la duplicación de contenido. La experiencia es primordial para saber reconocer lo que se debe tomar y desechar.
2.-Citar fuentes. Uno de los errores más comunes cometidos por un Editor de Contenido, es no darle su lugar del escritor. A pesar de ello, el citado de fuentes es éticamente fundamental a la hora de seleccionar, jerarquizar y curar contenido. Esta técnica no solo respeta los derechos de autor, también aporta relevancia y profesionalidad al curador.
3.- Complementar con multimedia. Esta técnica contempla la inclusión de una amplia variedad de formatos de contenido. Se trata de complementar el texto con videos, imágenes, extensiones y sonidos. Por ejemplo, si la nota o artículo habla del número de vehículos que circulan en el país, es posible insertar una infografía realizada por una institución u organización dedicada a evaluar el tráfico y la contaminación en la Ciudad causada por los vehículos. Asimismo, con opiniones de algunos personajes relevantes, las cuales se pueden encontrar fácilmente en Twitter. Incluso esta red social permite insertar los tuits directamente para hacerlos parte de las entradas.
4.- Resumir información. En ocasiones, encontrar un texto interesante pero gigantesco, puede poner al Curador de Contenidos en un dilema: “ser o no ser, publicarlo o no publicarlo”. Para esos casos, es ideal usar la técnica para resumir información, la cual se trata de realizar una versión propia, con comentarios y valores añadidos con el fin de generar un texto más breve. Al igual que en las técnicas anteriores, se requiere citar la fuente de inspiración y al autor del artículo original.
5.-Crear nuevos titulares. El título de una nota o artículo es clave para atraer a un lector. Se trata de la carta de presentación y en muchas ocasiones, es el elemento determinante para conseguir visitas. Esta técnica también es usada para mantener el estilo y el toque que distingue a nuestra página web o marca. La creación de titulares o modificación de los mismos, se dan con el objetivo de llamar la atención, incorporar palabras claves propias y usarlos como ganchos en las redes sociales.
6.- Usar herramientas como apoyo. Apoyarse en herramientas y aplicaciones ayuda a mejorar la organización y comprimir la carga de trabajo. Por ejemplo, Pocket es una opción que sirve para recopilar videos, mensajes, imágenes, páginas web y artículos, y guardarlos para leerlos más tarde.
7.-Paralelizar y conectar diferente información. Consiste en tomar fragmentos de uno o diferentes textos, y conectarlos con el tema y entre sí. Sin duda, es una técnica que exige una gran habilidad y experiencia para hacerlo de manera correcta, consistente y coherente.
8.-Usar storyboarding o storytelling. Ambos requieren de mucha creatividad y se basan en historias, las cuales son uno de los formatos preferidos por los lectores. Para llevar a cabo esta técnica, se puede hacer uso de comentarios en redes sociales, videos, imágenes, fotos y artículos, intercalados y presentarlos de manera creativa. Estos se acompañan de comentarios propios que sirvan como guía para el lector.
El Curador de Contenidos cuenta con diversas técnicas, estrategias y herramientas a su alcance, para enriquecer su trabajo. Aplicarlas con responsabilidad e ingenio será esencial para ofrecer el mejor contenido a sus lectores. Saber cómo curar contenidos requiere de una mente creativa, con objetividad y la capacidad para detectar lo que es realmente importante. Estos elementos son algunas habilidades que requiere un buen Editor.